Si ya el año pasado fue un año difícil para el consumo, 2010 no nace bajo mejores auspicios.
Sostenible puede ser la palabra que defina el año. La alimentación también recoge la necesidad de consumir responsablemente. Los recursos y el planeta tienen un límite en el que el derroche no tiene sitio. Aumentará el número de fabricantes que adquieran materias primas producidas bajo métodos sostenibles. Pero no se trata sólo dichas materias, sino la retirada de las bolsas de plástico, construcciones de edificios sostenibles, e incluso el acercamiento de las fábricas a las plataformas logísticas de la cadena.
La prudencia predomina en fabricantes y consumidores. Así que en lugar de aventurarse a lanzamientos que exijan un cierto amor al riesgo por parte del consumidor, muchos fabricantes optaron en 2009 por entrar en nichos ya conocidos, de los que hasta entonces estaban ausentes.
El signo de los tiempos está haciendo que la oferta saludable se decante por versiones «sin» o «menos», frente a la avalancha caracterizada en los años 2000 de productos «con».
Son varias las marcas de alimentación que se codean entre lo más granado de Facebook, compitiendo con Michael Jackson o Lady Gaga. Algunas empresas más modestas han encontrado otras vías para acercarse a potenciales clientes a través de la red: los blogs especializados en cocina, dónde se pueden ver recetas elaboradas con sus especialidades.
Un clásico que nunca se fue es el licenshing, destinado al público infantil; donde se usan personajes como «Los Simpson», «Hello Kitty»…, cuya función es la de comerciales famosos.
Vuelven las fusiones y adquisiciones. Se abre una nueva etapa de compras. Van a continuar, sin duda, las compras de oportunidad, y nadie descarta tampoco cambios entre los 50 principales fabricantes.
Hay una serie de tendencias, por último, plenamente asumidas o en vías de implantarse en otros mercados, que siguen estando verdes en España para el 2010. Como el desarrollo de alimentos destinados para deportistas.
