Se acerca Semana Santa y con ella, las correspondientes celebraciones. En Cataluña, las pastelerías y panaderías empiezan a exhibir las monas de Pascua en sus vitrinas y sus escaparates. En el caso de L’Obrador, recuperan la receta tradicional. La mona Cristina es un dulce artesano que sigue el proceso de elaboración clásico, utilizando ingredientes de primera calidad y largas fermentaciones.
Esta mona de L’Obrador, de casi 1kg, está hecha con una masa brioche de mantequilla, rellena de crema catalana y decorada con huevos de gallina, como marca la tradición, o de chocolate.
Originariamente, los padrinos regalaban una mona de Pascua a sus ahijados, adornada con tantos huevos de gallina como años tenia el niño, hasta que celebrara su primera comunión. La tarta tenia, entonces, forma de roscón, y con los años se ha ido modernizando, dando más protagonismo al chocolate.
La mona Cristina se puede encontrar en las tiendas de L’Obrador en Barcelona o en Sabadell.
Fuente: Pastry Revolution