La Confederación Nacional Francesa de Panaderos y Pasteleros se preguntaron “¿por qué las farmacias lucen todas una cruz verde que las distingue con facilidad y los panaderos no tenemos un logotipo que nos identifique?” La respuesta la encontraron con facilidad y crearon una “B”, en forma de dos panes superpuestos, en amarillo (de la miga) y marrón (de la corteza) que ya se ve en toda Francia.
Este logotipo, en fachadas en forma de placa de “Boluanger Traditionnelle” que les distingue como miembros de la Confederación, igualmente está presente en forma de vinilos para las puertas, escaparate, decoración interior, adhesivos para las camionetas de reparto, carteles y folletos. Estos elementos identificativos los distribuye la Confederación en un pack con un precio inferior a los 500 euros.
Tras una encuesta, el 93% de los consumidores opinaron que era una buena idea hacer destacar las panaderías con una imagen propia y que facilitase su localización. También los clientes habituales opinaron, en 65%, que creían interesante la iniciativa.
Fuente: Pastry Revolution
